El Palacio Real de Palermo (también conocido como Palacio de los Normandos) está situado en la parte más antigua de la ciudad, sobre un asentamiento púnico ubicado en el subsuelo de las Sale Duca di Montalto (Salas Duque de Montalto).
Durante la dominación árabe fue construido entre los ríos Kemonia y Papireto el primer núcleo palaciego, llamado Qasr, un término que en árabe significa, además de un palacio, tambien una fortificación con la prioridad de tareas militares. Con la llegada de los normandos a Palermo, en 1072, comenzaron los trabajos de reconstrucción y ampliación que llevarían en 1130, después de la coronación de Ruggero II de Altavilla (primer rey normando de Sicilia), a la transformación de la fortaleza en un palacio real y el centro neurálgico del poder. Dentro del palacio normando existía una fábrica y un taller textil, donde fueron fabricados objetos de singular belleza. En este contexto, las cortes de Ruggero II, Guglielmo I y Guglielmo II lograron el milagro de conjugar culturas muy diferentes entre si. Federico II de Suabia, hijo de Enrique IV Hohenstaufen y Costanza de Altavilla, fue el sucesor de la política de su abuelo Ruggero II y, aunque su permanencia en el palacio de Palermo fue solo en edad juvenil, organizó las actividades administrativas y culturales (Escuela Poética Siciliana). Después de un período de olvido durante la dominación angevina y aragonesa, el Palacio Real recuperó su prestigio en la segunda mitad del siglo XVI con los virreyes españoles. Se construyeron nuevos elementos arquitectónicos de estilo militar y de representación, entre estos los dos patios principales, Cortile della Fontana (Patio de la Fuente) y Cortile Maqueda (Patio Maqueda).
Los Borbones de Sicilia renovaron el Palacio Real, y asimismo encargaron la nueva decoración de la Sala d’Ercole (Sala de Hércules), espacio que se utiliza hoy para las reuniones de la Asemblea Regional Siciliana (Parlamento regional).
Sala de Ruggero
Lleva el nombre de Ruggero II. Las estupendas decoraciones en mosaico se deben a su hijo Guglielmo I.
Los mosaicos, de matriz profana, ejemplar único representando elementos fitomorfos, zoomorfos y antropomorfos (escenas de caza y emblemas alegóricos del poder normando). La mesa, situada en el centro del ambiente, ed un mueble de estilo neo-clásico, hecho con una porción de una secuoya petrificada fósil.
Sala de los Vientos
Es uno de los lugares más sugestivos del Palacio Real. Ubicada en una torre medieval del nucleo árabe normando, llamada Joharia y frente a la sala de Ruggero, actualmente cubierta por un techo de madera del setecientos, destaca en el centro la rosa de los vientos.
Sala de Hércules
La Sala de Hércules es el lugar donde se reúnen, desde 1947, los diputados de la Asamblea Regional Siciliana. Toma su nombre de las pinturas, que representan el ciclo dedicado al héroe de la mitología griega, terminado a principios del siglo XIX poe el artista Giuseppe Velasco (llamado “el Velazquez”). El Parlamento regional (ARS) ejerce el poder legislativo previsto del Estatuto autónomo siciliano y representa el primer y más antiguo parlamento italiano y uno de los más antiguos de Europa.
Tomado de la guía oficial.